LABIOS DE CHAROL: LA VUELTA DE UN CLÁSICO
El final de año viene repleto de vestidos de terciopelo, cuellos de pelo, abrigos de peluche, mary janes de tacón, aros dorados, lentejuelas por todos lados, colgantes llenos de brillo y color, piel llena de luz y labios de charol. Pura tendencia rescatada de los 70, 80 y 90 más fiesteros.
Los labios de charol son la contrapartida a los acabados mate que el reinado de la mascarilla ha impuesto, pero cuando se trata de celebrar dentro de casa es fácil sustituirlos por una capa de brillo de labios larga duración que garantiza un color intenso y efecto luminoso espectacular. Ese acabado puede contrastar con una piel más aterciopelada y un toque de iluminador en zonas puntuales del rostro y te puede acompañar de la mañana a la noche sin ningún problema en looks elegantes, pero también en otros más transgresores, sport, o desenfadados.
Es una combinación que favorece tanto como mezclar tejidos: Un jersey de cachemir con una falda de seda satinada, un traje de terciopelo con unos zapatos de charol, un pantalón de piel con una blazer de terciopelo o un top lencero de seda con unos vaqueros y una chaqueta lamé. Por ser opuestos funcionan bien. Sólo requieren de una mirada con calma a tu propio armario y de una pasada de gloss.
¿Te unes a la mezcla de tejidos y acabados para celebrar estas fiestas?
